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lunes, 15 de abril de 2024

y terminé de leerme el "diario a los setenta" de may sarton... un placer y una maravilla... may sarton, como creo que ya he dicho, me cae bien, leerla es como quedar con una amiga, con una amiga muy sabia y muy entretenida, que te va contando cosas de su día a día, a quién ha visto, quién le ha escrito, que ha estado leyendo, y como se ha sentido... una preciosidad de libro, que me ha transmitido mucha paz (aunque admito que me ha inquietado un poco que may sarton a sus setenta años tuviera más vida social (mucha más vida social) de la que tengo yo a mis cuarenta y seis años...)


y al final compré "baumgartner" de paul auter, y me la empecé a leer el sábado por la tarde, pero el sábado por la tarde yo no estaba muy centrada... así que leí un poco y paré para hacerme un café, y estuve viendo chorradas en instagram, y leí cinco o seis páginas más, y me hice otro café y decidí guardar las chaquetas de lana y sacar las chaquetas de entretiempo... pero cuando acabé, me di cuenta de que me faltaban un par de chaquetas de entretiempo, que deduje que se quedaron dentro de los bolsos que usaba el verano pasado, así que en vez de leer, me puse a ordenar esa habitación que uso para ir dejando todo lo que no sé dónde poner exactamente... y aparecieron las dos chaquetas que estaba buscando, y un par de chaquetas más que no recordaba que tenía, y que fue una alegría encontrar, además de tres pares de calcetines que había dado por perdidos hace tiempo, unos leggins, una camiseta de tirantes que llevaba meses echando de menos, y un montón de totebags que me entretuve en ordenar... estaba tan entretenida ordenando la habitación-trastero que a punto estuve de ponerme con el cambio de armario... pero recordé que abril es un mes complicado (anímica y temporalmente) así que en vez de seguir ordenando cosas, me metí en la ducha...

la noche se me fue hablando por teléfono con mis hermanas... hora y media con una, hora y cuarto con la otra... así que me leí unas diez páginas más de la novela del auster y me fui a dormir, agradeciendo a mis hermanas su ayuda para sobrevivir al no-cumpleaños...

he de decir que superado el sábado, el domingo la novela de auster consiguió engancharme, y me la leí casi, casi del tirón, antes de que la comida familiar empezase...

es la historia de baumgartner, un escritor de setenta años (creo que la vida quiere que entienda algo sobre los setenta años, que por cierto, son los que tiene mi padre en este momento...) que perdió a su mujer nueve años antes, y que aún lo está asimilando... y paul auster nos cuenta la historia de amor de baumgartner y anna (su esposa fallecida) y también la historia de sus padres, de su hermana (un poco solo) y también están los papeles de anna (curiosa casualidad), y su historia con otra mujer a la que le pide matrimonio, y una estudiante interesada en la obra de la difunta anna... de lo más entretenido, de verdad...

(el problema, como ya me ha pasado otras veces, es que sé que paul auster no es viudo, nunca ha enviudado (me metí en la wikipedia para comprobarlo), y así como en las memorias o autoficciones sobre duelos, doy todo por bueno, me haya pasado a mí o no, porque sé que me están contando lo que sintieron o lo que pasó, incluso lo que no pasó, y digamos que me lo creo todo, que todo me sirve, que todo me aporta; con las ficciones de duelos niego con la cabeza cuando no estoy de acuerdo, cuando, no sé cómo decirlo, siento el duelo sobreactuado, cuando algo me chirría, cuando (voy a decirlo) no me lo estoy creyendo... claro que sé que es un problema mío, y que no tiene nada que ver una novela con unas memorias o un diario...)

que está muy bien, que es cortito y de lo más entretenido, que yo creo que a él le habría gustado su regalo de cumpleaños, y que al final poco importa, poco amor o poca vida, sólo es un truco más para atenuar nuestra herida (que diría bukowski...)


y después de pasar la mañana del domingo leyendo a paul auster, y después de la comida familiar, que ayer se alargó (como los días) hasta las siete de la tarde, me leí "la visión del juicio. poemas de amor" de lord byron, uno de los libros que me regalaron mis hermanas para mi cumpleaños, y que me hizo mucha gracia, por él solía regalarme los preciosos libros de poesía que publica la editorial alba, y es más que probable que en algún momento me hubiera regalado éste de lord byron... que por cierto, ha sido un placer leer... porque aunque creo que hay determinados autores que hay que leer antes de cumplir los treinta años (y byron es uno de esos autores, que no sé porqué creo que hay que leer de joven para que te impresione todo lo que te tiene que impresionar), también creo que una vez leídos esos autores a la edad indicada, una se impresiona tanto, y les pilla tal cariño, y les profesa tal devoción, que los puedes seguir leyendo pasados los cuarenta, porque aunque ya no estás en edad de impresionarte, algo queda de tu yo adolescente...


y antes de irme a dormir me empecé (por aquello de que no puedo estar sin un libro empezado) "sobre la libertad" de maggie nelson... (porque antes de que el fin del mundo empezara, justo después del libro de may sarton que me regaló mi padre hace tres años, me leí un libro de ella ("bluets") que me regaló mi hermana la mediana?... sí, ese podría ser el motivo... porque me compré el libro de la maggie nelson hace meses, y no fue hasta anoche que se me ocurrió empezar a leerlo... otro truco de esos...)

así que de momento estoy leyendo el libro de maggie nelson...


viernes, 12 de abril de 2024

y después del libro de ellen gilchrist, me leí "h de h playbook" de anne carson (el libro que me compré de su parte, pero si no debo comprarme libros "de su parte" o al menos, si lo hago, no debo decirlo en voz alta (no sé si porque comprarme libros "de parte" de mi amor muerto es de loca, o simplemente porque nombrarlo incomoda (y ahora me acuerdo de lo que me contó julian barnes en sus maravillosos "niveles de vida" y no puedo evitar sonreír y darle las gracias una vez más por semejante maravilla de libro), pero el caso es que si no debo decir estas cosas, no sé si debo explicar porqué, cuando me enteré de que vaso roto sacaba un nuevo libro de anne carson, lo encargué en mi librería favorita, pedí que me lo envolvieran (mis amigas de la librería que está en la esquina de parís con valencia, son así de majas) y lo guardé en el armario hasta el día de mi cumpleaños... pero así fue... y no creo que haya nada malo en hacer algo así... lo que haré será dejar de contar estas cosas... aunque como el blog es mío, creo que puedo seguir confesándome aquí...))

el caso es que me compré "h de h playbook" por mi cumpleaños, porque él me lo habría comprado, y porque estoy enamorada de anne carson y quiero tener todos sus libros... 

(no hay que olvidar lo que pagué hace años por la descatalogada hasta hace poco "la belleza del marido" que no recuerdo si me llegó de una librería argentina o de una de estados unidos, pero que me costó un pico, entre los portes y lo que costaba en sí el libro...)

el caso, es que como en "norma jean baker de troya" o en su "autobiografía de rojo", anne carson adapta a su manera una tragedia griega... en este caso "heracles" de eurípides (tragedia que confieso consternada no haber leído, y eso que he leído bastante a eurípides, pero sí que es verdad que me sabía la historia por haberla leído en otras fuentes), en la que heracles (hércules si eres más de mitología romana que de mitología griega), vuelve a casa y asesina a su mujer y a sus hijos por culpa del estrés postraumático... eso pero a lo anne carson... una maravilla (si te gusta anne carson, claro)...

  
y después del libro de anne carson, me estoy leyendo "diario a los setenta" de may sarton, libro que le pedí a mi padre que me regalara, porque aunque él no lo sabe (se lo he contado ya un par de veces pero se le olvida) tenemos una tradición, y es que lleva cuatro años regalándome los diarios de may sarton que va publicando poco a poco la editorial gallo nero por mi cumpleaños...

(eso y que el primer libro que me leí de may sarton, el de "anhelo de raíces", que me regaló mi padre por mi cuarenta y tres cumpleaños, fue uno de los últimos libros que me leí antes de que el fin del mundo empezara, y cada vez que leo a may sarton, de alguna manera intento volver a esa paz y a ese sosiego (esa dicha) que sentía en ese momento, pero aunque ni con el "diario de una soledad", ni con "la casa junto al mar", lo he conseguido, la verdad es que may sarton me encanta, me cae bien, es un encanto y escribe bonito... así que aunque no consigo volver a evocar esa sensación, leerla es siempre un placer...)

así que me estoy leyendo "diario a los setenta", y may sigue en la casa junto al mar, y como el título indica, ya ha cumplido setenta años... y celebra sus setenta, y sigue cuidando del jardín, y recibiendo visitas, y haciéndolas, y dando recitales de poesía, y firmando libros, y escribiendo el diario, y poesías (señores de gallo nero: para cuándo una traducción de las poesías de may sarton?... yo la compro en preventa si hace falta!...) y también una novela... y anoche murió judy y tuve que cerrar los ojos (cierro los ojos sin darme cuenta durante varios segundos cuando alguien muere en los libros que me leo últimamente, y también cuando a alguien le diagnostican un cáncer...), y respirar hondo, y acabé llorando, porque ayer hizo tres años que mi amor se fue a urgencias la primera vez (cuando le dijeron que tenía anorexia nerviosa y lo mandaron a casa) y me pase el día un poco inquieta (y repitiendo mentalmente: anorexia nerviosa, anorexia nerviosa, anorexia nerviosa...) y triste (y puede que enfadada) y la muerte de judy (el gran amor de may) me pilló desprevenida y floja... 

así que paré de leer, me fui a la cocina a fumarme un cigarrillo, y decidí que lo mejor era irme a la cama, leí un rato más a may sarton, y hoy parece que estoy más centrada (claro que mañana es/era/sería/habría sido (lo de los tiempos verbales sigue siendo complicado determinados días del año) su cumpleaños, y aún no sé si regalarle el último del paul auster o el último del eduardo mendoza... y me imagino que si no debería comprarme libros de su parte, igual tampoco debería comprarle libros por su cumpleaños, pero no voy a preguntar, por si acaso...)