entre acojonada y encantada me he leído "oryx y crake" de margaret atwood, una distopía brutal sobre el fin del mundo...
"Hombre de las Nieves se despierta antes del amanecer y permanece tendido, inmóvil, mientras escucha cómo sube la marea, una ola tras otra pasando por encima de las diversas barricadas, chis chas, el ritmo del corazón. Cuánto le gustaría creer que todavía está dormido."
y a hombre de las nieves le gustaría creer que todavía está dormido, porque su día a día es complicadillo... es el último hombre que queda, al menos que él sepa, vivo en la tierra, después de que un virus haya matado en muy poco tiempo a toda la población mundial... él y los crakers, una especie, digamos mejorada de humanos hechos en el laboratorio por crake y educados por oryx, y de los que no sabemos muy bien cómo, hombre de las nieves es responsable...
y la atwood nos irá contando quién era hombre de las nieves, como fue su infancia en un complejo, como conoció a crake y luego a oryx, como era la vida antes del fin del mundo; mezclado con su día a día postapocalíptico, controlando el consumo de agua, y del poco alcohol que tiene, lo difícil que es conseguir comida y lo peligrosos que se han vuelto los animales modificados genéticamente...
además de contarles historias a los crakers, esos humanos perfeccionados, que creen que él es el profeta de crake...
una maravilla, acojonante y devastadora, que da miedo precisamente porque no parece tan improbable como podría parecerlo hace diez años...
me encantan las máximas que se repite a sí mismo hombre de las nieves para no volverse loco como que "el estricto cumplimiento de las rutinas diarias redunda en el mantenimiento de la moral y en la preservación de la cordura", por ejemplo...
y me encanta este momento también, cuando dice que:
"Ahora siente que Oryx flota hacia él por el aire, como llevada por suaves alas de plumas. Ahora está tomando tierra, posándose, está muy cerca de él, tendida a su lado, sus pieles casi se tocan. Milagrosamente cabe en la plataforma, aunque no es muy grande. Si tuviera una vela o una linterna, la vería, su delgada silueta, un fulgor pálido recortándose en la oscuridad. Si alargara la mano, la tocaría; pero entonces se desvanecería."
esa historia de amor que mezcla con los porques de las cosas, como cuando crake le explica a hombre de las nieves que: "como especie nos encontramos en un callejón sin salida, una situación mucho peor de lo que se supone. No se atreven a hacer públicas las estadísticas por miedo a que el personal tire la toalla, pero créeme, nos estamos quedando sin espacio-tiempo. Hace bastante que la demanda de recursos supera el suministro en zonas geopolíticas marginales, de ahí las hambrunas y las sequías; en breve ese exceso de demanda nos afectará a todos."
lo que no sé es si la atwood habla aquí de un futuro cercano o de lo que está ya pasando...
curioso es también cuando hablando del futuro (la novela fue escrita en el año 2003) hablando de la pandemia que nos cuenta la novela, margaret atwood dice que: "Durante la primera semana recomendaron consumir sólo agua hervida y evitar desplazamientos, y desaconsejaron cualquier tipo de contacto físico. En esos días se produjo un gran incremento en las ventas de guantes de látex y mascarillas protectoras."
quitando lo del agua hervida (que seguro que alguien hubo que la hirvió), da miedo leer ciertas cosas (como ese momento en el que hombre de las nieves recuerda que su madre le contaba que cuando ella era pequeña tenían una casa en la playa, que acabó bajo las aguas, igual que el resto de playas y bastantes ciudades de la costa este, cuando el nivel del mar subió tan deprisa y el volcán de las islas canarias causó aquel maremoto...)
así que ahora espero impaciente que salga "maddaddam" (la tercera y última parte de esta trilogía) para poder saber como acaba esta historia...
y ayer me estuve leyendo "quita tu cuello degollado de mi cuchillo" de diane di prima, pero este post es ya muy largo, así que creo que lo mejor será seguir mañana...
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