sobre miércoles y un poema de denise levertov...

miércoles y te escribo desde el despacho... con la caja por hacer y tanto sueño, que cuando salga, estoy planteándome tomarme directamente dos cafés a ver si me despierto de una vez...

y es miércoles, y aunque el día de ayer no estuve aquí ni la mitad de mi jornada laboral (por causas ajenas a mi voluntad), al menos conseguí terminar con la postfacturación, antes de cerrar... y aunque debería estar haciendo la remesa que tenía que haber hecho ayer y que no me dio tiempo, como ves, he abierto el editor, y me rebusco las palabras para ver que te cuento...

así que tiro del hilo de mis lecturas y hoy te contaré que me estuve leyendo una antología de denise levertov, poet(is)a norteamericana a la que conocí hace unos meses en la antología siete poetas norteamericanas actuales (matizando actuales con el año de edición de la antología en cuestión que es: mil novecientos noventa y uno, si no recuerdo mal), y a la que volví a encontrar en beat attitude (esa otra preciosa antología que me habló de las mujeres poetas de la generación beat).

así que decidí buscar más poemas suyos, y encontré esta antología, editada por la hiperión, que es una maravilla...

y como ya sabes que soy de las que piensan que mejor que hablar de poesía, es leerla; te voy a copiar uno de sus poemas... uno que me gustó especialmente, no sé si porque empieza con dos versos del gran yeats; o porque yo también creo que mientras los ojos miran hacia fuera, el núcleo del cantar es mudo anhelo... 

  

un abrigo

"puesto que hay más coraje

en caminar desnudo"

w. b. yeats

y caminé desnuda

desde el principio



aspirando

mi vida

exhalando

poemas,



arrogante de inocencia.



mas de las nubes llenas de cantares

que hizo mi aliento por el aire frío



ha brotado un abrigo,

blanco que,

                     si aquí una palabra

                     allí otra

se helaron, resplandece,

pesado como piedra.



la máscara que nunca me propuse

llevar, como de escarcha,

me cubre el rostro.

                                 mientras los ojos miran hacia fuera,

el núcleo del cantar es mudo anhelo.

denise levertov

y ahora corto y cierro... a ver si consigo que el jefe me invite a desayunar, porque creo que necesito, al menos un café ya...