sobre el fin de chéri...

martes y te escribo desde el despacho... con la facturación encima de la mesa esperando que me ponga con ella, la caja de ayer por hacer, y el correo abierto, impreso y entregado a quien corresponda en cada caso...

y aunque debería ponerme ya con la postfacturación, la verdad es que no me apetece nada... así que una mañana más, abro el editor de librodearena, y me rebusco las palabras para teclear...

así que tecleo y hoy te cuento que me estuve leyendo a principios del mes pasado el fin de chéri de colette... y porque me dio por buscar este libro descatalogado tantos años después de leerme la primera parte... pues porque alguien me lo nombró hace poco en alguno de los libros que me he leído últimamente... en cual?... pues si he de ser sincera, no lo sé... aunque bien pudiera haber sido en el libro de ensayos de adrienne rich... pero, como te decía, no estoy segura...   

lo que sí que recuerdo es que lo busqué con el libro en cuestión en el regazo, y que me costó muy barato...

chéri cerró detrás de él la reja del jardincillo y olisqueó el aire nocturno: «ah, qué bienestar...!» pero inmediatamente rectificó: «no, no hace buen tiempo.» los castaños apretujados pesaban sobre el calor prisionero. sobre el farol de gas más próximo vibraba una cúpula de verdor rojizo. hasta el amanecer, la avenida henri-martin, ahogada de vegetación, esperaría el débil flujo de frescor que asciende del bois.

colette (el fin de chéri)

y así da comienzo colette a esta novela; y así encontramos a chéri, tantos años después de haberlo dejado... y ahora chéri está casado, y no es feliz... y lea se ha hecho mayor, hecho para el que el pobre chéri no está preparado... 

un chéri que no sabe lo que quiere en un parís de postguerra... y no te contaré nada más, que bastante dice ya el título de la novela...

sí te contaré que ha sido un placer, como siempre, leer a colette, y que ha sido un placer también reencontrarme con personajes que conocí hace años y saber que fue de ellos...

y ahora voy a cortar y cerrar, que aunque no me apetezca, digo yo que tendré que ponerme con la postfacturación...