sobre ve y pon un centinela...

y es jueves y te escribo desde el despacho, un poquito descentrada, porque llevamos el horario cambiado... así que antes de intentar centrarme y decidir por donde empezar, he abierto el editor de librodearena, para rebuscarme las palabras una mañana mas...

así que me rebusco las palabras y hoy te cuento que la semana pasada me estuve leyendo ve y pon un centinela de harper lee... esa novela que dicen que fue escrita antes que matar a un ruiseñor, y que nos cuenta la vuelta a casa de scout, veinte años después.

y admito que cuando leí por ahí que el libro iba a salir me hizo ilusión... y es que aunque asumes que hay autores de un sólo libro, cuando se anuncia que harper lee va a sacar otra novela, pues te alegras... y vale que es todo muy raro, que el manuscrito se perdió, que ahora lo han encontrado; o que ella no autorizaba su publicación, porque tendría sus razones, y ahora que no está muy bien de salud, va y lo publican; incluso se dice que puede que no lo haya escrito ella... en fin, teorías conspiratorias para todos los gustos alrededor del evento editorial del año...

así que la verdad es que aunque sabía que lo iba a comprar, no sabía cuando... pero los días previos a la publicación, las distintas librerías que tienen mi e-mail me contaban que iba a salir, me enseñaban la portada, me ofrecían portes gratis y hasta un cinco por cien de descuento. así que el día que salió a la venta en españa, no pude más, y pedí que por favor me lo enviaran... y en cuanto terminé de leer el libro de la jansson que me estaba leyendo, me lo leí... claro.

desde atlanta, venía mirando por la ventanilla del vagón restaurante con un deleite casi físico. mientras se tomaba el café del desayuno, vio como quedaban atrás las últimas colinas de georgia y aparecía la tierra rojiza, y con ella las casas con tejados en medio de patios bien barridos, y en los patios las inevitables matas de verbena rodeadas de neumáticos encalados. sonrío cuando vio la primera antena de televisión en lo alto de una casa de negros sin pintar. conforme aparecían más y más, se redobló su alegría.

harper lee (ve y pon un centinela)

y así empieza esta novela... jean louise (o scout, para que nos entendamos) vuelve a casa, a maycomb, alabama, desde nueva york, donde vive, para ver a atticus, su padre, que no está bien de salud... una jean louise de veintiseis años que se encontrará una realidad que no reconocerá como suya, y un padre que no es exactamente como ella recordaba...

y es que estamos en el sur, y son los años cincuenta, justo en el momento en que se están promulgando las leyes contra la segregación, que a un pueblo de alabama, no pueden llegar igual que a nueva york... no las va a entender igual una chica de veintiséis años, que un abogado de setenta y dos (que es, sino me equivoco la edad que tiene atticus en esta novela)

y he de decir que he leído mucho sobre esta novela desde que la compré... antes y después de leerla... y aunque en general tengo la sensación de que no la he leído bien... de que mi lectura está de algún modo equivocada, porque a mí la novela me ha encantado y no me ha escandalizado; si que es cierto (he de admitirlo) que no es matar a un ruiseñor... y es que al terminar de leerla, pese a todas mis manías en lo que a lecturas se refiere, no pude evitar coger matar a un ruiseñor de la estantería... para contrastar que recordaba y que no... para ver si de alguna manera, ve y pon un centinela cambiaba mi visión, y la verdad es que no... pero la relectura ya te la contaré mañana... porque aunque había pensado escribir un solo post sobre las dos novelas de harper lee, necesito decir más cosas y no tengo el tiempo necesario hoy...

así que corto y cierro, de momento, mañana retomo el tema si me da tiempo...