y es jueves (aunque con la semanita que llevamos, admito que he tenido
que mirar el calendario para comprobarlo) y te escribo desde la caja,
soportando las impertinencias de los clientes que no sólo se quieren
colar, sino que cuando les dices que tú no atiendes, te preguntan que si
sólo sirves para cobrar y a lo que suelo limitarme a sonreír (por
aquello de dientes, dientes que es lo que les jodemolesta)... en fin...
jueves, y la migraña me ha vuelto a despertar antes de que el
despertador sonase, aunque la verdad es que ya no sé si me despierta la
migraña o estos nervios que, por muchos ansiolíticos que me tome, no me
acabo de quitar... así que antes de bajar a trabajar he estado leyendo
un rato, lo que admito que hace que el día empiece de otra manera...
jueves y hoy te contaré que estuve leyendo delirio y destino de
maría zambrano, libro que compré en esa librería que está en la esquina
de parís con valencia, y que como la propia zambrano explica en la
presentación se publicó cuarenta años después de haber sido escrito...
parece imposible presentar este libro, inédito en su mayor parte, cerca de cuarenta años después de que fuera escrito y más imposible y prodigioso aún el que se publique ahora. a qué razón obedece el que en este momento lo saque a la luz cuando tantas ocasiones y tan largo tiempo he tenido para hacerlo?, me pregunto. acaso me mueve el afán de poner en claro mi vida o, quizá, se esconde en él algún secreto que yo quería celar? no, no hay nada que yo haya deseado ocultar. tal vez sea necesario para personas que yo no conozco, de otras generaciones ya, para que se miren en una perspectiva histórica, para que lleven el latido de la vida en el que estoy todavía, en el anhelo de revivir el texto y no dejarlo abandonado a conjeturas y posibles investigadores históricos. estoy aquí y ahora todavía para responder de lo por mí escrito.
maría zambrano (delirio y destino)
y te diré que la zambrano tiene razón en sus razones, que esta novela
(aunque ya sabes como es ella, y aunque la forma es la de una novela, se
le escapa la filósofa que lleva dentro, lo que, la verdad es que, es
una maravilla) de sus veinte años... esta novela de como llegó (quizás
como se gestó) la segunda república... de los sueños de los jovenes y
los no tan jovenes, de las esperanzas, de las ilusiones, de ella y de
toda una generación... y después el final del sueño, el levantamiento,
la guerra y el exilio...
cierra el libro el discurso que dió cuando le concedieron el cervantes
(siendo ella la primera mujer a la que se le concedía dicho premio)
y antes de cortar y cerrar, me vas a permitir que te copie otra cita del
libro... cita en la que la zambrano nos dice lo que, según ella,
debería ser el amor...
el amor debe de ser la búsqueda del adentrarse más allá de la conciencia, en el mundo del sueño, acercarse cogidos de la mano a las puertas del jardín inexorablemente amurallado, y solo entreabierto; un instante en que se rebosa de certidumbre, en que la duda parece abolida para siempre, en que se viaja hacia dentro del ser -ese secreto intacto- en que nada transcurre.
maría zambrano (delirio y destino)
quizás porque conozco ese instante en que se rebosa de certidumbre, en el que la duda parece abolida para siempre...
y ahora corto y cierro... que el jefe ha vuelto y tendremos que definir los turnos para hoy... digo yo...
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