miércoles, y te escribo desde el despacho...
miércoles, y en lo que va de mañana he conseguido terminar los tres
albaranes que, por motivos ajenos a mi voluntad, tuve que dejar ayer a
medias, a falta de un par de códigos en cada uno; y también tengo la
caja hecha, las facturas y los listados archivados, el correo abierto,
impreso, entregado y en algunos casos hasta contestado; y aprovechando
este ratito de calma, aprovecho y tecleo...
y tecleo para contarte que estuve leyendo la prima phillis de
elizabeth gaskell, autora a la que leí hace años porque era una de esas
autoras que la woolf nombra en el principio de su cuarto propio, y que
desde entonces (con los amores de sylvia) no puedo evitar buscar de vez en cuando...
es maravilloso para un joven disponer por primera vez de un alojamiento para él solo. creo que nunca me he sentido tan satisfecho y orgulloso como el día en que, a los diecisiete años, me senté en un pequeño cuarto triangular encima de una pastelería de eltham, la capital del condado. mi padre se había despedido de mí aquella tarde después de dictarme una cuantas normas elementales de conducta que me sirvieran de guía en mi nueva vida. yo iba a trabajar con el ingeniero del ferrocarril encargado de la construcción del pequeño ramal de eltham a hornby.
elizabeth gaskell (la prima phillis)
y así empieza mrs gaskell a contarnos esta historia... y el que habla es
paul, que acaba de independizarse gracias a un trabajo que le ha
conseguido su padre... y será paul quien nos contará la historia de su
prima phillis, a la que conocerá por esas normas de cortesía, ya que su
madre le pedirá que vaya a presentarse a unos parientes, y así conocerá a
su prima phillis, la hija de la casa... y sin ser consciente,
desencadenará un drama...
y es que la gaskell nos cuenta en primera persona una historia de amor
que nada tiene que ver con el narrador, en la que el joven paul será
testigo de los hechos, e intentando mejorarlos, solo conseguirá
complicarlos...
una novela triste, porque la historia de la prima phillis es una
historia triste, en la que además de a las penas de la pobre phillis,
asistiremos a los remordimientos del pobre paul...
una maravilla... claro que mrs gaskell suele serlo...
y ahora corto y cierro...
No hay comentarios:
Publicar un comentario