sobre entre horas (tercera parte...)

jueves y te escribo desde la caja... y aunque no estoy segura de ser capaz de escribir lo que pretendo, teniendo en cuenta el ritmo de interrumpciones a las que estoy siendo sometida, pues lo intento, ya que una vez que consiga llegar hasta mi mesa, teniendo en cuenta todo lo que pretendo hacer, no sé si voy a tener tiempo de abrir otra vez el editor y contarte lo que pretendo...


y es que hoy quería seguir hablándote de esa antología de la lumen, titulada entre horas y que contiene relatos de mujeres escritos entre finales del siglo diecinueve y principios del veinte...

y empezaré por el empapelado amarillo de charlotte perkins gilman (relato que admito que tenía ganas de leer, desde que conocí a esta autora en aquel fin de siècle de cátedra, en cuya introducción se nombraba precisamente este relato como uno de los mejores de la autora...)



no es habitual que gente corriente, como john y yo, alquile para el verano una casa solariega.

un caserío de estilo colonial, una finca heredada de generación en generación; yo diría una casa encantada y sería el colmo de la dicha romántica, pero eso sería pedir demasiado al destino.

charlotte perkins gilman (el empapelado amarillo)


y aunque la casa solariega no está encantada, tiene una habitación, con un empapelado amarillo que "es lo bastante apagado como para confundir la vista al seguirlo, lo bastante pronunciado como para irritarte constantemente e invitarte a analizarlo, y cuando uno sigue ciertas derrungadas curvas en un tramo corto, de repente se suicidan... viran en ángulos atroces, se eliminan en contradicciones inauditas."

relato escrito en forma de diario, y dicen que con un transfondo autobiográfico, que pretende criticar (o tal vez, simplemente contar) los tratamientos que se seguían en la época con las mujeres que sufrían depresión postparto... un relato impresionante, que va cambiando (como el propio empapelado amarillo) a medida que avanza la narración y que tiene un final de esos que lees varias veces (porque te deja tan impresionada que no tienes otra manera de asumir lo que te han contado...)


el segundo relato del que te hablaré hoy, es quinta edición de mabel wotton (autora a la que no conocía, y que he tenido el placer de conocer gracias a esta antología...)



aquella tarde, leyden no había tenido ningún éxito. la señorita elliott, a la que estaba muy interesado en ver, no se encontraba en casa, algo de lo más humillante puesto que ella sabía que tenía intención de pasar a verla.

mabel wotton (quinta edición)


relato en el que la casualidad juega un papel importante al "regalarle" a un autor que no encuentra ninguna historia que contar, tras el éxito de su primer libro, una historia, que tiene fuerza, pero a la que le falta "estilo"... un relato quizás también de como cambian las oportunidades dependiendo del nombre; y de la ingratitud hacia aquellos que nos han hecho grandes favores...

el final?... tan triste, desolador y la vez "inconsciente" que admito que me dejó algo tocada, por aquello de que al final (como en la vida real) hay personas que no tienen lo que merecen...


y en tercer y último lugar (de momento), el relato titulado la chica de las monjasde grace king (otra de esas autoras a las que conocí en la antología fin de siècle y que he vuelto a encontrar en este entre horas...)



la chica de las monjas bajaba en el barco de cincinnati. dos hermanas la acompañaron y la dejaron a cargo del capitán, le consiguieron un camarote, se cercioraron de que llevaran hasta allí el pequeño baúl, colgaron en la pared su nueva cartera, le mostraron cómo echar el cerrojo a la puerta por la noche, se despidieron con un apretón de manos -aunque las despedidas no significaran realmente nada para las hermanas- y la dejaron allí.

grace king (la chica de las monjas)


que cuenta el viaje en barco de esa chica recién salida del internado de monjas donde la metió su padre y que tras su muerte se dirige a nueva orleans a conocer a su madre, de la que no sabe nada, hasta que el barco atraca... y no puedo decir más, porque como todos los finales de esta antología, te pilla por sorpresa en un par de líneas, y desvelar cualquier detalle sería una crueldad por mi parte...


tres relatos espectaculares...


corto y cierro... 

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