telegramas...

lunes y te escribo desde la caja... stop.

y esto empieza a convertirse en costumbre y la verdad es que no me hace mucha gracia... stop.

lunes con sueño, migraña y mil cosas que dejar hechas antes de mañana... pero desde la caja no puedo hacer nada, así que te envío un telegrama... stop.

y yo quería contarte lo bien que me lo pasé anoche viendo como clark gable estaba entre su esposa (la preciosa mirna loy) y su secretaria (la maravillosa jean harlow), pero la verdad que desde la caja no se me acaba de dar bien esto de ordenar palabras... stop.

y es que desde que he empezado este telegrama ya me han interrumpido tres veces... stop.

sí te diré que la escena en la que la harlow se sube al barco a punto de zarpar para ser sincera con la loy, me encanta... stop.

y me encanta también el jovencísimo james stewart, que no acaba de entender que su futura esposa tenga que seguir trabajando, ahora que a él le han dado el aumento que necesitaban para casarse... stop.

y eso que dice clark gable de que si quieres que alguien siga siendo honrado, no deberías acusarle de lo contrario... stop.

y ese final (no el de clark y mina, que también; sino el del coche... y es que es cierto que a veces buscamos problemas, y si no los encontramos, nos los inventamos...), stop.

corto y cierro... stop.

que si me vuelven a interrumpir igual se me cruza un cable... stop.

porque así, la verdad es que no hay manera de escribir...