te escribo desde el despacho con la caja de ayer y antes de ayer por hacer (esta semana está siendo algo caótica), con el correo abierto y entregado a quien corresponda... con un albarán metido, otro a medio meter, y otro que ni he empezado... con las tres líneas de teléfono sonando a la vez, y mi compañera que se ha ido a tomarse un café...
(superado el momento crítico, retomo mis tecleos, aunque admito que he perdido el hilo de mis pensamientos...)
jueves, y yo lo que venía a contarte es que la semana pasada estuve leyendo irse de casa de carmen martín gaite...
quizás es la historia de un regreso... de un buscar algo que no se sabe lo que es... la historia de amparo miranda, que se fue de casa con su madre hace muchos años, y que después de haber triunfado en la vida, vuelve, aunque sin darse a conocer, a una ciudad de provincias en la que sigue estando presente en las conversaciones, sin querer...
pero no es solo la historia de amparo miranda (lady drake, de casada), es también la historia de manuela roca, que se está separando, y que no quiere ir a ver a su familia, y que pasa los días en la piscina del hotel donde se aloja amparo miranda, y donde tiene lugar también una tertulia, vigilada por un camarero muy atento (que será el primero en darse cuenta de que la tal amparo miranda de la que hablan las cotillas que toman el té, es la señora drake, a la que miran entre admirativas y envidiosas cada vez que se la cruzan en el hall del hotel)
es también la historia de agustín, el exmarido de manuela, y de su hermana társila... la historia de valeria, y su reencuentro con rita (que ahora tiene una tienda en la calle del olvido donde se crío la protagonista)... la historia jeremy y maría (los hijos que amparo ha dejado en nueva york), y la historia de abel y de olimpia (el primer amor de amparo, y la que probablemente fue su única amiga...)
y recuerdos que entremezclan el presente con el pasado... los recuerdos de la infancia de amparo, cuando no era fácil ser hija de soltera en una ciudad tan pequeña... los recuerdos del esfuerzo por salir de la pobreza mediante el estudio... los recuerdos de una madre que quizás no le dió todo el amor que necesitaba... los recuerdos del primer amor... y del segundo que acabó en boda... y del tercero, que terminó de forma triste un año antes de que la martín gaite comience a contarnos esta historia...
historias que se entremezclan, como los destinos de amparo y manuela, que se cruzan un par de veces antes de que una de ellas vea la esquela de la otra en el periódico y decida ir al entierro que le llevará a otro encuentro... o cuando amparo va a la peluquería de társila y se encuentra cara a cara con su infancia en forma de armario... o cuando descubre que la joven que tiene una tienda en su antigua casa de la calle del olvido, es la hija de su primer amor...
las cosas cuando pasan no se piensan, se piensan mucho más tarde, años más tarde, y generalmente por la noche. por las noches es cuando entra el prurito de despiezar lo que ya queda tan lejos que no puede entenderse, cuando salen esos perros raros que se ponen a excavar la tierra sin saber tan siquiera lo que buscan.
carmen martín gaite (irse de casa)
una maravilla... una auténtica maravilla ese tejer y entrecruzar vidas de la martín maite, que teje una novela alucinante y hace que parezca fácil...
y ahora corto y cierro... que como te decía, tengo un albarán a medias, y un par de cosas mas que acabar...
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