sobre norma desmond...

lunes otra vez y te escribo desde el despacho...


lunes de sueño, porque pese al café con leche del desayuno, yo sigo cayéndome de sueño... y lunes poco productivo, porque admito que tras mas de una hora en este despacho, he hecho poco mas que abrir el correo, que al abrirlo decía que habían mas de cuarenta mails nuevos, pero que tras eliminar los spams, se ha quedado en apenas cuatro correos de verdad...


y tengo encima de la mesa la caja por hacer, y poco mas entre las tareas pendientes de esta semana que acaba de empezar... y es que entre el viernes y el sábado, que suelen ser días tranquilos, hice todo lo que tenía pendiente... así que hasta que entre material, poco que hacer... porque en esta mañana de lunes, hasta el teléfono parece haberse quedado dormido...


será porque el miércoles es festivo, y no sé como es en otros lares, pero en esta ciudad, las semanas con un festivo intercalado, la verdad es que son de lo mas extrañas... como si pensando en el día de descanso, no fuesemos capaces de centrarnos... eso y que llueve, y ya sabes lo que dice el dicho: "no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy; pero si llueve, mejor deja para mañana lo que tengas que hacer hoy, o para pasado mañana, si mañana llueve todavía..."





en fin... que yo hoy venía a contarte que anoche volví a ver el crepúsculo de los dioses (curiosa manera de traducir sunset boulevard), porque como me imagino que notaste, me apetecía ver algo de wilder (no confundir con wyler... ni a la viceversa)


así que anoche estuve en sunset boulevard con la gran gloria swanson en el inolvidable papel de norma desmond, una estrella del cine mudo que en la soledad de su mansión planea volver al cine con un guión que servirá de excusa para que william holden se quede en la casa... para ayudarla...


y aunque el papel de norma desmond, como te decía, es de los inolvidables; siento una especial debilidad por max (ese gran director, y primer marido, convertido en fiel sirviente interpretado por erich von stroheim).


y william holden, claro... en el papel de guionista desencantado y aprovechado... y la dulce nancy olson en el papel de guionista que aún cree en los finales felices, y que está dispuesta a olvidar la llamada y la mansión y todo lo que él le ha contado por amor... y buster keaton y cecil b. demille interpretándose a sí mismos...


aunque he de decirte que lo que de verdad me hace ver la película una y otra vez es el final... uno de esos finales perfectos... un final que me sigue poniendo la piel de gallina, un final que mezcla la locura con la ternura, que mezcla los sueños de norma desmond con el amor convertido en devoción de max... un final con el que billy wilder consigue decirnos de otra manera, que el cine es una mentira maravillosa... porque ese momento en el que norma desmond sale de su mutismo para preguntar por las cámaras... ese jefe de policia entendiendo al mayordomo con la mirada... ese erich von stroheim diciendo lo de luces, cámara, acción... y la escalera parada mientras norma desmond baja las escaleras como sólo una actriz de los años veinte sabía hacerlo... y ese discurso emocionado... y ese increible primer plano...


y aunque, citando al propio wilder (o a su daphne), sé que nadie es perfecto, la verdad es que el final de esta película, parece serlo...










y ahora corto y cierro...


No hay comentarios:

Publicar un comentario