recuerdos de papel (rimas, veinte poemas y una canción)

retomo estos recuerdos de papel para hablarte de un par de libros que me regaló mi abuela hace muchos, muchos años... los dos los tengo atados en la memoria porque me los regaló juntos... mis dos primeros libros de poemas de mayor, me atrevería a decir ahora con el pasar de los años...


y como ya habrás deducido por el subtítulo, el primero (y digo el primero porque fue el que leí el primero, y porque creo que aún hoy sigue siendo el primero) eran las rimas de becquer y el segundo eran los veinte poemas de amor y la canción desesperada de neruda... claro...


y llevo parada un rato con el editor abierto y los ojos entrecerrados porque intento poner en palabras lo que sentí cuando con unos doce añitos descubrí a becquer, pero lo cierto es que no sé hacerlo... sus rimas son algo mas que un libro... son probablemente una parte importante de nuestra educación sentimental... son un lugar seguro... son las letras que componen los primeros suspiros... porque (suspiro sin darme cuenta mientras intento continuar escribiendo este post que está resultando mas complicado de lo que había pensando al empezarlo) por culpa de las rimas todos nos preguntamos al ver a las oscuras golondrinas (en tu balcón sus nidos a colgar) si se aprenderían nuestros nombres y si volverán... porque supimos lo que era poesía... y porque cada vez que asoma a mis ojos una lágrima, me preguntó si dejar o no hablar al orgullo, porque en sus rimas nos contó lo que podía pasar si lo hacíamos...


(y me vuelvo a quedar sin saber como seguir... porque todos los versos que aprendí a fuerza de leerlos por las noches, una y otra vez, me dan vueltas mientras intento hablar de lo que significaron para mi las rimas)


imagino que no es fácil... porque como te decía esos versos que afloran a los labios casi sin que nos demos cuenta forman parte de nosotros... esa parte que descubrió lo que la poesía podía decir y hacernos sentir... y voy a dejar de intentar definir lo que las rimas de becquer significan para mí... solo diré que todavía las guardo con cariño... que todavía las releo de vez en cuando... que todavía recito los versos sin darme cuenta cuando menos me lo espero...


el otro libro... los veinte poemas de amor y la canción desesperada, también lo leí tantas veces que pasó a ser mío... también aprendí versos que aún recuerdo cuando el cielo está estrellado, y tiritan, azules, los astros a lo lejos... y no olvido que es tan corto el amor y tan largo el olvido... que cualquier noche te puedes descubrir escribiendo los versos mas tristes que has escrito...


dos libros que como te decía tengo atados juntos... atados a esos días cuando aún era pequeña pero empezaba a dejar de serlo... cuando empecé a descubrir que la poesía guardaba secretos que mas tarde descubriría... secretos que sigo descubriendo aún hoy... cada vez que leo y me entreveo en versos ajenos...