el modelo 62


 

no serán pocos los lectores que advertirán aquí diversas transgresiones a la convención literaria. para no citar más que algunos ejemplos, los personajes argentinos pasan del voseo al tuteo cada vez que le conviene al diálogo; un londinense que tomaba sus primeras lecciones de francés se pone a hablarlo con sorprendente soltura (para peor en versión española) apenas ha cruzado el canal de la mancha; la geografía, el orden de las estaciones del subterráneo, la libertad, la psicología, las muñecas y el tiempo dejan evidentemente de ser lo que eran bajo el reino de cynara.


así empieza cortazar su 62/modelo para armar... un libro en el que según palabras del propio cortazar "la opción del lector, su montaje de los elementos del relato, será en cada caso el libro que ha elegido leer."


y lo admitó: cortazar ya me conquistó con el prólogo... eso y que ya antes de empezar a leerlo sabía que el libro partía del capítulo sesenta y dos de la rayuela (y ya sabes como adoro la rayuela y mi debilidad por ella)


juan entra en el restaurante polidori, con un libro que acaba de comprar y que no sabe porque ha comprado porque no tiene intención de leerlo y un comensal gordo pide un castillo sangriento (o sangrante, pero él decide traducirlo como sangriento) y de ahí ese momento en el que las ideas se van asociando, mézclando, sin que él consiga atrapar el momento... porque en el libro ha leido algo que le hace pensar en la condesa (que presumo que es la misma de la que alejandra nos contó su historia) y en frau marta y en helene, claro... siempre en helene, que es adonde van a parar todos los caminos...


y lo admito, me he divertido intentando montar este modelo sesenta y dos... caminando por la ciudad, a veces de la mano de juan, que se baja del tranvía en la siguiente esquina... a veces con helene, con ese bulto entre los brazos que le pesa tanto...


y no sé que es peor, si ser un cronco o un petiforro, pero lo que sí sé es que polanco y calac y sus conversaciones absurdas (como la de las golondrinas en el subte) me han hecho sonreir cada vez que han discutido...


y me ha fascinado tell, la danesa loca, entregada a un hombre que sabe enamorado de otra... y la relación entre marrast y (la malcontenta) nicole, y el sacrificio equivocado que ella hace para dejar que él la deje como necesita dejarla...


y seguiría tecleando, porque es un libro que me ha fascinado, como suele fascinarme cortazar, cuando no sabes si está escribiendo o haciendo magia...


y es que no hay capítulos... ni una línea temporal clara... porque a veces el pasado es presente, y a veces las cosas que sabemos que han pasado todavía tienen que pasar... y de fondo esa ciudad a la que uno no llega cuando quiere, sino cuando ella te deja, en la que puede pasar cualquier cosa, que tendrá consecuencias en la vida real... auque al final no haya nada mas real que esa ciudad...


que me ha encantado, fascinado y entusiasmado este 62 / modelo para armar... y que como siempre, un placer leer a cortazar... y jugar a lo que él, mediante palabras, quiera jugar...





pd. días después de cerrado el libro, sigo preguntándome qué escondía dentro la muñeca que tell le mandó a helene, esa que juan le había regalado a ella...


y sigo repitiendo los bisbiseos (bisbis bisbis) de feuille morte...


No hay comentarios:

Publicar un comentario