misericordia

- los sueños, los sueños, digan lo que quieran -manifestó nina- son también de dios; y quién va a saber lo que es verdad y lo que es mentira?

lo dice nina, la señá benina, en la novela misericordia de galdós. y lo cierto es que tras terminar el libro, tengo un poco esa sensación...


la pobre benina, que pide limosnas a escondidas de su señora (la señora paca) para evitarle la vergüenza que ella misma pasa, y así mantenerla, a ella y a su hija obdulia, y a todo aquel que benina vea en necesidad... y para que doña paca no sepa que va a la iglesia de san sebastián a pedir limosna, benina se inventa a don romualdo (que luego resulta que no es inventado), un cura, en cuya casa se supone que ella trabaja a tiempo parcial...


personaje inolvidable entre todo el crisol de personajes que nos regala galdós, como doña paca, esa mujer venida a menos, y sus hijos, y don frasquito de ponte delgado (que será el único que proteste por lo que pasará) y la nuera de doña paca (que menudo genio se gasta) y el ciego almudena, que quizás precisamente por ser ciego, será el único (junto con don frasco) de darse cuenta de lo maravillosa que es benina... de que es un ángel... y tan buena como su nombre indica...


y que ha sido una maravilla volver a leer a galdós... que me ha encantado su misericordia con sus contrastes de luces y sombras... que me ha dolido este libro, tanto que incluso antes de terminarlo yo ya estaba llorando... y que el final es algo increible... no sé como se puede escribir algo tan triste y tan bonito a la vez...


de verdad que una maravilla, galdós y su benina...