y terminé de leerme "tierra de empusas", de olga tokarczuk, y me quito el sombrero que no llevo...
un sanatorio, un hostal de caballeros, y la esposa del dueño que se suicida nada más empezar el libro... y wojnicz, un joven enfermo de tuberculosis que está allí para recibir tratamiento... y el bosque... y la voz de las narradoras... y las oscuras leyendas... y los huéspedes del hotel...
maravillosas esas charlas de sobremesa donde los pacientes hablan despectivamente sobre las mujeres dando pruebas de su inferioridad, tanto intelectual, como moral... como maravillosa es la nota de la autora al final del libro nombrando a los autores (un montón de autores por cierto) a los que ha parafraseado para esas charlas entre señores...
y maravilloso el giro inesperado (a la altura de coche por caballo del faulkner o a ese momento mágico del orlando de la woolf...) en las últimas cien páginas, que me pilló tan a contra pie, que después de diez páginas tuve que volver atrás y volver a leerme esas diez páginas, porque de verdad, de verdad, de verdad, que no me lo esperaba... y el final?... marededeusenyor qué final... maravilloso y encima en plan decimonónico (con ese "qué fue de" cada uno de los personajes...), con lo que me gustan a mí esos finales a lo middlemarch...
que me ha encantado la "tierra de empusas" de la olga tokarczuk... y por cierto, las empusas son criaturas fantásticas del folclore griego antiguo... hijas de hécate, se dice que adoptan diversas formas y con forma de mujer, seducen a los hombres y se acuestan con ellos por la noche o durante la siesta, y les chupan sus fuerzas vitales hasta que mueren...
y después del libro de la tokarczuk, me leí "finjamos que soy feliz", de sor juana inés de la cruz... una de esas maravillosas antologías de poesía portátil de la random house que tanto me gustan... y que empieza precisamente con esos famoso versos: "Finjamos que soy feliz, / triste Pensamiento, un rato; / quizá podréis persuadirme, / aunque yo sé lo contrario"...
(versos que no sé la de veces que me he repetido a mí misma en estos últimos años...)
y ha sido un placer volver a leer a sor juana inés, como siempre...
y ahora me estoy leyendo "deseo cenizas para mi casa" de daria serenko... y ha empezado fuerte... muy, muy fuerte...
(y si en las penas desaparece gente, con las alegrías caen las caretas... ten en cuenta quién llora contigo, pero también quién se alegra cuando las cosas te salen bien... porque inesperadamente no todo el mundo se alegra de que te vayan bien las cosas... y es muy, pero que muy desconcertante... y curioso también, que quién no te lo esperas se emociona y se alegra de corazón cuando te van bien las cosas...)
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