sobre jueves y un poema de paul valery...

jueves, aunque he tenido que mirar el calendario varias veces, porque esta semana llevo un desmadre con las fechas que la verdad es que no me acabo de aclarar... y yo ya tengo la caja hecha, las facturas y los listados guardados; el correo abierto, reabierto, impreso y entregado; el problema técnico de ayer solucionado; y en este momento un albarán encima de mi mesa que se supone que debería meter, pero que esperará un ratito, porque necesito teclear para despejarme...

así que tecleo, aunque acaba de entrar otro albarán, así que se me acumula la faena, y mis tecleos se vuelven culpables... me descentro, y se me olvida lo que venía a contarte...

jueves y te contaré que después de algunos años, he vuelto a leer a valery (uno de mis amores de juventud) en una antología de la visor (que ya sabes que es una de mis debilidades) y que incluía esa joven parca que llevo tiempo queriendo releer, sin encontrar el momento...

y como no sé hacer reseñas, ni hablar de poesía, me vas a dejar que te copie uno de los poemas de paul valery... y que te diga como me gusta volver a ciertos autores (sobretodo a ciertos poetas) gracias a los que creo que de alguna manera soy lo que soy, ya son sus versos los que me susurro a mí misma muchas veces sin darme cuenta... porque a veces las palabras que nos faltan, son las que ellos nos dieron en algún momento...

los pasos

tus pasos, por el silencio creados

avanzan santa, lentamente,

hacia el lecho de mi impaciente

vigilar. fríos, callados.

queridos, adorados pasos mudos

que sin oír, mis ansias adivinan.

qué regalos celestes se encaminan

hacia mi lecho, en unos pies desnudos!

si para mi sueño obseso

tu boca haces avanzar,

yo preparo el paladar

al alimento del beso.

no lo apresures, ten calma,

dulzura de ser no siendo,

que de esperar voy viviendo

y son tus pasos mi alma.

paul valery

un placer volver a leer a valery y encontrar algunos de aquellos poemas que me explicaron el mundo cuando creía que ya estaba de vuelta, pero en realidad solo estaba empezando un camino, que es ahora cuando sé que está sólo a medias... 

y ahora corto y cierro... que digo yo que algo tendré que ir haciendo...