jueves (dicen que santo, pero como a mí me pilla trabajando, pues para
mí es jueves y ya está...) y te escribo desde el despacho... con la caja
por hacer; un par de mails encima de mi mesa que quiero que el jefe se
lea; una factura del año pasado que me han pedido que buscara; y los
listados de los bancos del mes de marzo, a ver si poco a poco consigo
centrarme y hacer que cuadren...
jueves y yo te hablaré de un libro que encontré casi sin buscarlo... una antología de poetisas griegas...
y es que no sé si recordarás que no hace mucho me leí una antología de
la hiperión de tres poetisas del renacimiento italiano (gaspara stampa,
chiara matraini y vitoria colonna), en la que aparte de descubrir a
estas tres maravillosas poetisas, descubrí que quizás la historia no es
tal y como nos la contaron, leyendo el prólogo (que es una maravilla)
del que me apunté algunos nombres, que después estuve buscando por esas
librerías de viejo virtuales en las que una descubre tesoros que de otra
forma jamás encontraría...
el caso es que no recuerdo qué nombre buscaba (creo que el de ánite)
cuando encontré esta antología de poetisas griegas que no sabía que
existía y que tuve que pedir que me mandasen al despacho... claro...
y con esta antología te diré que he descubierto dos cosas: una que no
sólo safo escribía en la grecia clásica... que había otras mujeres como
corina, praxila, erina, nóside, ánite, filina y algunas otras de las que
en este momento no recuerdo los nombres que también escribían versos y
que tuvieron su reconocimiento; y otra, porque son precisamente los
versos de safo los que han llegado a nuestros días... porque aunque me
he guardado varios poemas de esta antología para mi pequeño palacio de
vocabulario, la verdad es que safo, es safo... y sus poemas tienen un
algo...
así que antes de cortar y cerrar, te dejo un poema de safo...
las estrellas que rodean la hermosa luna
vuelven a ocultar su faz resplandeciente,
... se les heló el alma
y dejan caer las alas
safo
uno de nóside...
extranjero, si te embarcas hacia la ancha mitilene
para alumbrarte con la flor se las gracias de safo,
di que era amiga de las musas y que la tierra locria
me dio el ser. sabido que nóside es mi nombre, sigue tu camino.
nóside
uno de ánite...
te dejamos, mileto, patria amada, por no haber consentido
el impío desafuero de los gálatas sin ley,
tres ciudadanas en plena juventud, a quienes el violento
ares de los celtas abocó a esta suerte.
y es que no toleramos su sangre impía ni la unión con ellos,
sino que en hades hallamos novio y protector.
ánite
y otro de filina
huye, dolor de cabeza, huye, agotado, bajo una roca.
huyen los lobos, huyen los solípedos corceles,
acuciados por los golpes por obra de este cumplido
encantamiento mío.
filina
y ahora corto y cierro...
No hay comentarios:
Publicar un comentario