el sol del domingo no se la llevó pero casi me hizo olvidarla...
además tenía un día extraño... estaba ñoña e insoportable... desficiosa perdida... así que tiré mano del cine, porque entre los poemas de auden y sus ensayos necesitaba una pausa...
así que me puse una de esas pelis mágicas que sabes que pase lo que pase te van a hacer sonreir... una de mis pelis heredadas... esas pelis que me encantan porque a mi madre le encantan y hay pelis que se heredan como algunos gestos y algunas manías... descalzos por el parque...

ese quinto piso sin ascensor (mas la escalinata de fuera) donde jande fonda y robert redford viven los primeros días de su matrimonio... con las visitas de la madre de ella... el barba azul que vive en el ático y que se cuela por la ventana del dormitorio... el técnico del teléfono que asiste a una de las broncas matrimoniales mas frías de la historia... el agujero en el techo por donde nieva la noche que robert pasa en el sofá... y ese final descalzo por el parque... intentando demostrarle a ella, paseando descalzo por el parque a dos grados y sin abrigo que puede ser lo que ella quiere que sea... solo por ella... y el maravilloso final en la cornisa... una peli mágica...
después mestalla, que ganamos dos cero y con invitación a cenar...
y claro, la migraña de la que hablaba al principio, que ayer me ató a la cama y no me dejó hacer nada... solo llorar por la penita que me daba a mi misma que me doliera tanto la cabeza y leer a ratos con poca luz algunos de los ensayos de auden...
hoy bien, gracias... al menos de momento... la migraña debió quedarse dormida entre los ibuprofenos y el orfidal... así que teclearé bajito no se vaya a despertar...
No hay comentarios:
Publicar un comentario