sobre viernes y un poema de renée vivien...

viernes (por fin!) y te escribo desde el despacho...


viernes y aquí me tienes, con la caja por hacer, sin haber desayunado y tecleando...


viernes y más tranquila, quizás precisamente porque es viernes... quizás porque ayer la tarde fue bastante productiva, y sólo tengo pendiente mis rutinas de los viernes... ese sentar pagos y cobros, porque al final de la semana, poquito más suele quedar pendiente...





el caso es que yo hoy venía a contarte que el domingo pasado estuve leyendo una antología de renée vivien, cenizas y polvo... la compré cuando compré aquella otra antología suya que me la dió a conocer...


y te diré que la vivien, me ha fascinado, como la otra vez...y que guardé uno de sus poemas... así que me vas a permitir que te lo deje aquí... porque hoy es viernes, y el poema le pega al día (sólo tienes que cambiarle el género...)






espera



en esta alcoba llena de promesas marchitas

desgranan sus aromas jazmines del ayer...

para ti sola lucen mi vestido y mis joyas,

y sólo para ti desaté mis cabellos.



escogí estas alhajas... sabrán encandilarte?

en mi corazón ávido hay un algo que calla...

cómo me encontrarás y qué diras al verme,

amiga, cuando cruces el umbral de mi ocaso?



nos besará una lluvia de algas y violetas

a través del esmalte tenue de los cristales...

saboreo la angustia sublime de aguardar

la dicha que se acerca cuando la tarde muere.



calladamente acecho la tan soñada hora...

cae la noche, arrastrando su manto claroscuro...

mi alma ilimitada se disgrega en la estancia

y al fin se templa el aire: amanece la luna.

renée vivien





y ahora corto y cierro... que voy necesitando un café con leche...




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