jueves y ayer cambié el código que tenía que ser cambiado, aunque la teoría era más fácil que la práctica, al final conseguí solucionarlo... y aunque tengo la caja por hacer (se está convirtiendo en una costumbre esto de tener la caja por hacer mientras tecleo), al menos el correo lo tengo ya impreso y cada mail donde corresponde (las consultas en la cubeta de las consultas, las facturas en el cajón de las facturas...) y desde aquí veo un albarán en la cubeta de los albaranes, que tendré que meter en cuanto termine este post que estoy escribiendo...
y yo hoy quería contarte que la semana pasada estuve leyendo tres hombres en una barca de jerome k. jerome...
es curioso como ciertos libros llegan a nosotros... es de todos conocida la teoría que dice que un libro te lleva a otro... y yo ya sabes que soy fiel devota de la santa casualidad... así que cuando hace un par de meses, estaba leyendo shakespeare and company de sylvia beach, anoté mentalmente este título (bueno, la verdad es que lo anoté mentalmente en inglés: three men in a boat, que es como aparecía en la edición italiana), porque cuando la dueña de la mítica librería americana en parís habla de los libros que puso en el escaparate el día de la inauguración, nombra éste, y añade que era el libro favorito de adrienne (su compañera, y dueña de otra librería en parís...), así que como te decía, lo anoté mentalmente, sin conocer siquiera el nombre de su autor, y ahí quedó la cosa...
fue poco mas o menos un mes después, cuando leyendo el inicio de la primavera de penelope fitzgerald, volví a encontrarlo... era precisamente este libro el que frank reid iba a imprimir en su imprenta... así que no me lo pensé mas (tener internet en el móvil es lo que tiene) y con el libro abierto sobre el regazo, realicé una busqueda por mis librerías favoritas, y en dos clicks, pedí que me lo mandaran cuando pudieran al despacho... porque como bien sabes, un libro te lleva a otro libro... pero si son dos los libros, que en menos de un mes, te hablan de otro: no puedes menos que leerlo... es algo inevitablemente inevitable...
nosotros cuatro, jorge, guillermo samuel harris, yo y montmorency, estábamos sentados en mi cuarto fumando y charlando sobre nuestra triste situación -claro está que eso se refería a nuestro estado de salud-. nos sentíamos aplanados, tan deprimidos física y moralmente, que ya comenzábamos a preocuparnos.
jerome k. jerome (tres hombres en una barca)
y así empieza jerome k. jerome a contarnos esta historia... la historia de estos tres hombres y un perro, que deciden pasar un semana en una barca por el támesis, y la de cosas que les pasan...
y aunque ya lo sabes, te diré que me he reído mucho con este libro (lo que me hace pensar que tengo humor de dama victoriana), sobre todo con ese momento en el que se cae al agua, e intenta convencer a sus compañeros de viaje de que no hay nada mejor por las mañanas que bañarse en el río... o con ese momento absurdo en el que el narrador relaciona los amores de enrique VIII y ana bolena, con el aumento de la piratería... o cuando cuenta lo incómodo que es estar invitado en una casa donde haya una pareja de enamorados...
que me ha encantado, vamos... y entiendo que sylvia beach lo incluyera en el primer escaparate de la shakespeare and co. y que fuera precisamente este el libro que la fitzgerald eligió para la imprenta del protagonista de su historia...
y ahora corto y cierro, que creo que hoy nos toca ir a por un poquito de cambio...
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